Cómo equilibrar el gasto y el ahorro en medio de las vacaciones de verano
Antes de salir de vacaciones, conviene planificar y calcular de cuánto dinero se dispone para gastar en ese periodo, respetando siempre los objetivos de ahorro marcados para el largo plazo. Y, dentro de lo posible, tratar de ceñirse a ese presupuesto.
Los españoles recibimos a muchos visitantes extranjeros todoslos años... pero también nos vamos de vacaciones. Viajamos por España y por todoel mundo y gastamos más en verano de lo que solemos gastar en otras épocas delaño. Según el barómetro 2014 elaborado por la web de viajes Trip Advisor, cadaespañol va a gastar de media 3.485,23 euros en sus vacaciones, un 1% más que elaño pasado.
Disfrutar de las vacaciones está muy bien pero es importanterealizar un presupuesto y un plan para que ese gasto no impacte negativamente ala vuelta del descanso. Ni tenga implicaciones muy negativas en las metas deahorro que nos hemos marcado, ya sea para el corto, el medio o el largo plazo.
Aunque parezca un tópico, y aunque tener en cuenta el dineroen vacaciones apetece poco, la clave está en presupuestar y equilibrar el gastocon el ahorro. Es una labor imprescindible para no llevarse sorpresas a lavuelta y para no poner en peligro los objetivos marcados. Es decir, para disfrutar sin consecuencias. Hay algunas páginaswebs que ayudan a organizar el gasto en vacaciones y tienen alertas si el gastose supera para que podamos corregir nuestro comportamiento a tiempo.
La importancia del presupuesto
El equilibrio entre el gasto y el ahorro es fundamental. ¿Porqué? Por que unas vacaciones, por ejemplo, no pueden poner en riesgo el ahorroque llevamos haciendo todo el año para metas de más largo plazo, como lallegada de la jubilación o la compra de una vivienda. Si nos hemos gastado eldinero presupuestado para esos fines, los sentimientos de arrepentimiento yfrustración aflorarán a la vuelta... y ya no habrá vuelta atrás.
¿Qué hacer entonces? Antes de salir de vacaciones, convieneplanificar y calcular de cuánto dinero se dispone para gastar en ese periodo,respetando siempre los objetivos de ahorro marcados para el largo plazo. Y,dentro de lo posible, tratar de ceñirse a ese presupuesto.
Una forma de maximizar ese presupuesto de gasto es tratar deahorrar en la organización de las vacaciones, por ejemplo buscando los mejoresprecios para desplazarse o alojarse en los buscadores web. Y planificando con tiempo.
Si no te gustabuscar o no tienes tiempo para ello, buscar destinos más económicos, como lacosta española, puede funcionar también... sobre todo si viajas en familia conhijos y se hace fundamental encontrar una oferta para grupos.
¿Y si soy jubilado?
Si eres jubilado, a buen seguro te preocuparás aún más por elbolsillo, pero también habrás planificado con más antelación. Es fundamentalque seas disciplinado con el gasto y que lo adaptes a los ingresos que obtienestanto por parte de la pensión pública como de otras vías privadas, como fondosde inversión, planes de pensiones o rentas. En este punto, la paga extra que recibes puede ser una buena medida de lo que puedes gastarte en las vacaciones de verano.