Cómo ha evolucionado la manera en la que ahorramos
Analizamos las causas que han llevado a una creciente preocupación por el hábito del ahorro
El ahorro es un recomendable hábito que ha cambiado notablemente en los últimos tiempos, en paralelo a los distintos cambios y transformaciones sociales. Desde la mayor conciencia acerca de las bondades del ahorro hasta unos ahorradores más formados y con mayor conocimiento de cómo deben organizarse financieramente, se ha recorrido un importante camino en España que, sin embargo, aún se prolonga hasta su llegada a niveles existentes en países vecinos. ¿Cuáles han sido los principales cambios en las tendencias de ahorro en estas últimas décadas?
Somos más conscientes de la necesidad del ahorro
Ahorrar es una gran virtud, pues permite afrontar imprevistos que tarde o temprano siempre aparecen. La mayor temporalidad e incertidumbre laboral que existe actualmente frente a la que existía hace escasas décadas ha invitado a muchos españoles a optar por generar un ahorro en tiempos buenos que les pueda ayudar en tiempos de inactividad laboral. Antes existía cierta sensación de que el trabajo no iba a faltar y el ahorro era una elección más voluntaria.Comenzamos a integrar el ahorro en nuestra estructura de gastos doméstica
Si tendemos a ahorrar lo que sobra, es más que posible que no lleguemos a ahorrar nunca. Ante esto, es importante considerar el ahorro como un gasto corriente más, incorporarlo en el presupuesto mensual y comprender que debemos gastar aquello que sobra una vez descontado el ahorro como partida obligatoria entre los gastos. Esto cada vez se hace más.Existe más formación financiera
Sin poder lanzar las campanas al vuelo, pues es un camino que solo se ha empezado a andar, la población tiene más conocimientos acerca de cómo gestionar su ahorro, qué significan términos esenciales como la inflación o los tipos de interés, y cómo funcionan los principales productos de ahorro.Cambia el desino del ahorro
España ha sido un país que ha mostrado históricamente una preferencia por la vivienda en propiedad que no se estila en los principales países de nuestro entorno. Aproximadamente un 70% de los españoles opta por la opción de tener vivienda en propiedad, algo que está cambiando en los años recientes fundamentalmente por dos razones:- Esta preferencia se basaba en que una vivienda en propiedad era ahorro seguro, pero en los últimos años se ha visto que el valor de la vivienda sí puede bajar… y mucho.
- La vivienda es un ahorro bastante ilíquido, lo que implica que en caso de necesidad, puede existir una importante demora hasta que se convierte en dinero efectivo.
Cada vez se invierte más y se ahorra menos
Si entendemos el ahorro como la mera acumulación de dinero, esto se hace cada vez más insuficiente en objetivos financieros como, por ejemplo, la planificación de la jubilación. Si en lugar de ahorrar invertimos, no solo acumulamos dinero, sino que buscamos rentabilizar el mismo, tratando de hacerlo crecer al máximo siempre sin exceder el nivel de riesgo recomendado para nuestro perfil inversor. Esto es esencial para, por ejemplo, hacer frente a la inflación anual, que en caso de solo ahorrar, derivará en que el poder adquisitivo de nuestro dinero acumulado vaya descendiendo. En este sentido, irrumpe con fuerza la planificación financiera. Ya no se trata solo de guardar dinero mes a mes, sino de realizar un plan de ahorro que implica acciones que antes casi ni nos planteábamos:- Establecer para qué necesitamos ahorrar.
- Determinar el plazo temporal de tiempo de que disponemos.
- Analizar los recursos con los que partimos.
- Establecer el plan de ahorro.
- Hacer un seguimiento periódico del plan y realizar modificaciones si existen desviaciones respecto al objetivo.