“Hobbies que dan sentido a tu vida”: El mundo de los coches clásicos
Inauguramos esta serie de artículos sobre estilo de vida y aficiones con un entretenimiento en auge: los coches clásicos
La realidad de nuestros días es que cada vez vivimos más. Una vez jubilados, viviremos una media de 18 a 20 años, y cada año que pasa esta esperanza de vida sigue subiendo. Estamos hablando de un periodo de tiempo demasiado largo para estar sin ningún tipo de plan de vida. Es más, está demostrado que las personas que llegan a la jubilación y permanecen pasivas acaban padeciendo enfermedades con origen psicosomático, precisamente por no tener algo que les llene y les dé sentido a su vida.
Llegar a la jubilación en plenas condiciones es una tarea que empieza hoy. Una jubilación feliz requiere de tres ingredientes: haber ahorrado un mínimo de recursos económicos, conservarse en relativa forma física y también, y no menos importante, contar con hobbies o aficiones que nos ayuden a realizarnos como personas.
Cuando hablamos de estas actividades gratificantes, nos referimos a dedicaciones que, cultivadas desde hoy, puedan ser mantenidas en la etapa de retiro. Así, una persona que se limite a practicar deportes agresivos físicamente tales como el fútbol debe saber que llegado cierto momento en la vida probablemente deba renunciar al mismo, simplemente por una cuestión de físico.
Iniciamos esta serie de artículos para aportar sugerencias de actividades que está ahí y que probablemente desconozcáis, actividades que pueden ser mantenidas a lo largo de toda nuestra vida. En esta ocasión, os introduciremos al mundo de los coches clásicos. Concretamente, hablamos de los clásicos populares, esos coches que construyeron la España de los 60, 70 y 80 y con los que hemos crecido.
El parque automovilístico español de los 60 estuvo protagonizado por los Seat 600, 1400C y 1500. El proteccionismo comercial que existía en el país por esas fechas limitaba las opciones de compra de vehículos, de esa forma el país se inundó de “pelotillas” y, en menor medida “milquis”.
Más tarde empezaron a salir nuevos modelos algo más potentes, como la saga del Seat 850, los Renault Gordini, 8 y 8TS, el Citroën 2CV, los SIMCA …para llegar a finales de los 70 con una mayor variedad de marcas a disposición de los conductores españoles con modelos provenientes de la Ford, Chrysler/Talbot, Peugeot, Renault y otros. ¿Quién no se acuerda de los R-5 o R-12, del Citroen GS Pallas o del Peugeot 505?
Estos coches ya cuentan con la categoría de clásicos. Despiertan la admiración de jóvenes y mayores, además de buenos recuerdos vividos a su lado. Técnicamente, a partir de 25 años es posible declararlos como vehículo histórico y son muchos los Ayuntamientos que no cobran Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica a estos modelos.
Hay muchas maneras de disfrutarlos: desde salir a comer un domingo conduciendo uno de ellos, hasta apuntarse a un Club de Clásicos de tu provincia. Muchas veces estos Clubes son muy activos y se dedican a organizar no sólo concentraciones de domingo, sino también viajes gastronómicos a distintos puntos de España viajando en estos coches antiguos. Puedes ver una relación de clubes de toda España en el siguiente enlace: Clubes de clásicos
También es posible entrar en contacto con ellos a través de sus perfiles en redes sociales, donde cuelgan innumerables fotos y cuestiones relativas a sus “joyas sobre ruedas”.
Si además, te gusta la mecánica, estos coches todavía te permiten “meterles mano”. El vano motor tiene suficiente espacio para usar herramienta tradicional y los motores no van casi apretados. En la mayoría de los casos son como mecanos, se arreglan sin ordenadores ni sondas, únicamente recurriendo al “ajuste fino” de los mecánicos de toda la vida.
Si hablamos de coste, puede sorprendernos lo asequible de estos coches. No son modelos caros, ya que aunque no lo parezca todavía queda bastante stock. Así, muchos modelos se pueden encontrar en un estado razonable desde 2.000 €. Obviamente, el precio final dependerá del estado de chapa y mecánica. A propósito de precios, es buen momento para comprar este tipo de ejemplares. Como consecuencia de la crisis los precios se han reducido considerablemente y no es mala inversión a futuro, ya que la propia escasez de estos bienes empuja al alza los precios en el medio y largo plazo. Y con relación a los repuestos, muchos de estos modelos tuvieron tiradas altas. A modo de ejemplo, citaremos que del Seat 600 se fabricaron 783.745 unidades, lo que hace que exista todavía cuantioso stock nuevo y usado en tiendas especializadas de repuestos y también en internet, donde muchos particulares venden piezas que tenían en sus garajes y trasteros.
Os animamos a conocer este mundillo nuevo. Como veis, es una actividad que mantenida en el tiempo puede ser muy gratificante.