¿Cómo afectarán al ahorro las últimas medidas del BCE?
Los bancos centrales de todo el mundo se han convertido en los guardianes de la economía. Normalmente con el manejo de los tipos de interés iban regulando la evolución económica enfriando en momentos de calentura con tipos más altos o bajándolos para fomentar el crédito en situaciones de decrecimiento o recesivas.
Desde la crisis de 2007 que estalló con las hipotecas subprime los bancos centrales han hecho esfuerzos enconados para mantener las economías activas a base de bajar los tipos de interés. Esta forma de actuar ha tenido un claro perdedor que no es otro que el ahorrador tradicional de cuentas corrientes o depósitos bancarios, mientras los endeudados gozan de una situación histórica. También la banca se ha visto perjudicada al ver reducidos sus márgenes.
Esta férrea determinación de los bancos centrales se hizo para evitar el colapso económico vivido en el famoso crash de 1927 en el que no se hizo nada, lo que provocó una larga recesión en prácticamente todo el mundo.
En este septiembre, el presidente del Banco Central Europeo (BCE) –en una de sus últimas intervenciones antes de pasar el testigo del cargo- ha vuelto a aplicar una batería de medidas con el fin seguir insuflando dinero a la economía. Elevó del -0,4% hasta el -0,5% los depósitos que los bancos tienen parados (tipo de facilitad de depósito) cuando excedan de un mínimo que se retribuye al 0%.
Así a partir del 30 de octubre se aplicará el -0,5% pero se les permite a los bancos aumentar en seis veces las reservas mínimas obligatorias al 0% por lo que supone un alivio para las entidades y también para sus clientes ya que pendía la amenaza de que los bancos empezasen a cobrar por tener el dinero en el banco. Esto supone menos tipos negativos del BCE a la banca con lo que ha beneficiado a las acciones de los bancos y a sus clientes.
Según datos de los expertos, los bancos europeos tienen un exceso de dinero de 1,86 billones de euros en el BCE. De esta cifra y con las últimas medidas de Draghi antes de dejar su cargo, 800.000 millones estarán al 0% y 1 billón al -0,5%. Con un mayor volumen al 0% desaparece el miedo a que los bancos cobren a sus clientes particulares, aunque ya cobran a empresas e institucionales. Y además, se les obliga a que muevan el dinero y den más créditos.
Su efecto en la inversión es esa mayor tranquilidad para el ahorrador conservador y una mejora para los accionistas bancarios que han visto subir el precio de estas entidades en Bolsa. Pero hay más. Estas medidas favorecen la toma de riesgo en las inversiones. En este 2019 las rentabilidades de las Bolsas, los bonos, el oro y el inmobiliario han sido muy buenas. El experto Kevin Koh Maier explica que “las operaciones monetarias de escala masiva impulsadas por los bancos centrales de mayor importancia, como en el caso de la Reserva Federal Americana bajando tipos de interés por segunda vez desde la crisis financiera y por parte del Banco Central Europeo reduciendo tipos de interés de los depósitos y reiniciando su programa cuantitativo, parecen ser positivas para la continuación en la toma de riesgo”.