Las pensiones públicas podrían cubrir un porcentaje cada vez menor del último salario

El aumento del número de cotizantes no bastaría para cubrir el aumento de los pensionistas, que alcanzarán los 15 millones en 2050.

Las sucesivas reformas de las pensiones tendrán consecuencias: los trabajadores españoles tendrán que retrasar su jubilación y cotizar más años. También podrían asumir el riesgo añadido de perder poder adquisitivo e incluso de asumir bajadas en la prestación inicial si el crecimiento económico es muy bajo o nulo o el sistema presenta un déficit estructural. Unos riesgos que, ante la situación económica, podrían tener sentido a corto plazo aunque algunos economistas confían en que eso no se produzca a medio y largo plazo.

Pero además la anterior reforma podría tener un efecto añadido: aunque consigan mantener el poder adquisitivo, los futuros pensionistas cada vez podrían cubrir una parte más pequeña de su último salario con la pensión pública. Lo que significa que en el momento del retiro sus ingresos se verían mermados y tendrían que afrontar su nueva vida con menos ingresos, si no los complementan de otra manera.

Ésta es una de las consecuencias del previsible mayor aumento del número de pensionistas que de cotizantes.

Así, y aunque la relación entre ingresos a la Seguridad Social y rentas salariales totales podría mantenerse bastante estable, la de cotizantes con respecto a los pensionistas tenderá a descender. Hasta 2050 se prevé que el número de pensionistas pase de casi 9 a 15 millones, y para compensar ese aumento, los cotizantes tendrían que alcanzar los 27 millones, o aumentar los ingresos al sistema muy por encima de los gastos, dos supuestos improbables según los economistas.

Por ello, la pensión media con respecto al salario, o la llamada tasa de sustitución que actualmente está en torno al 80% en España para las rentas más bajas -una de las más altas de la OCDE-, tendería a bajar.

La disminución de la tasa de reemplazo no significa que el poder adquisitivo de la pensión caiga, sino que su crecimiento es menor al de los salarios.